Nuevo Sistema de Entradas y Salidas digitaliza el control de fronteras

La Unión Europea inicia la implantación del EES, que reemplaza el sellado manual de pasaportes por un registro digital automatizado

Desde el 12 de octubre de 2025, la Unión Europea aplica el Sistema de Entradas y Salidas, un mecanismo digital que sustituye el sellado manual de pasaportes por un registro electrónico automatizado de las entradas y las salidas de viajeros procedentes de terceros países. Su implementación, que se está desarrollando de manera gradual hasta el 10 de abril de 2026, forma parte de un proceso de digitalización de los procedimientos fronterizos en el espacio Schengen. El sistema se aplica en las fronteras aéreas, terrestres y marítimas de todos los estados participantes, y su objetivo es registrar electrónicamente los datos del tránsito de los viajeros no comunitarios que realizan estancias de corta duración. ¿Qué es el Sistema de Entradas y Salidas? El EES (Entry/Exit System) es un sistema informático automatizado destinado a registrar cada cruce de las fronteras exteriores europeas por parte de nacionales de terceros países. Se trata de un procedimiento habitual en otros destinos (Estados Unidos de Norteamérica, Corea del Sur, Malaysia...), al que el viajero internacional está acostumbrado y que facilita los trámites en frontera. Sustituye el proceso de sellado manual de los pasaportes y almacena información sobre fecha, hora y lugar de entrada o salida, junto con datos personales y biométricos (cuatro huellas dactilares y una imagen facial). El sistema también calcula automáticamente los días de estancia en el territorio Schengen, de acuerdo con la norma que limita las visitas de corta duración a 90 días dentro de un período total de 180 días. El EES está operativo en los 29 países europeos que forman parte o están asociados al espacio Schengen, entre ellos España, Francia, Alemania, Italia, Noruega, Suiza e Islandia.

En los aeropuertos, puertos y pasos terrestres, los pasajeros utilizan quioscos o cabinas de autoservicio, donde presentan su pasaporte y se capturan sus huellas e imagen facial
En los aeropuertos, puertos y pasos terrestres, los pasajeros utilizan quioscos o cabinas de autoservicio, donde presentan su pasaporte y se capturan sus huellas e imagen facial © Shutterstock

Ámbito de aplicación y exenciones Este sistema se aplica a los nacionales de terceros países que cruzan la frontera exterior europea para realizar una estancia de corta duración, con o sin visado. No obstante, existen exenciones específicas establecidas en la normativa de la Unión Europea. No se aplica a: - Nacionales de los países europeos que utilizan el sistema, así como los de Chipre e Irlanda - Nacionales de terceros países titulares de una tarjeta de residencia y sean familiares directos de un ciudadano de la UE - Nacionales de terceros países que sean titulares de una tarjeta/permiso de residencia, y los familiares de un nacional de un tercer país que pueda viajar por Europa como cualquier otro ciudadano de la UE. - Viajeros de terceros países que se desplacen a Europa en el marco de un traslado intraempresarial, investigación, estudios, prácticas, voluntariado, programas educativos, intercambios o colocación au pair - Titulares de permisos de residencia o visados de larga duración - Nacionales de Andorra, Mónaco, San Marino y los titulares de pasaportes expedidos por el estado de la Ciudad del Vaticano o la Santa Sede - Personas exentas de las inspecciones fronterizas o que tengan privilegios específicos en el cruce de fronteras. - Titulares de permisos de tráfico fronterizo menor válidos. - Tripulación de trenes de pasajeros/mercancías en viajes internacionales Funcionamiento del registro automatizado Cuando un viajero no comunitario cruza una frontera exterior, este sistema EES registra automáticamente sus datos personales y biométricos que se vinculan al documento de viaje. En los aeropuertos, puertos y pasos terrestres, los pasajeros utilizan quioscos de autoservicio o cabinas automatizadas en las que presentan su pasaporte, se capturan sus huellas e imagen facial, y los datos se almacenan en la base central europea. Durante la fase de implantación progresiva, algunos puntos fronterizos podrán continuar aplicando controles manuales de forma temporal. Implicaciones para los viajeros El sistema afecta a los nacionales de terceros países, incluidos los ciudadanos británicos que, después del Brexit, son considerados viajeros extracomunitarios. La primera vez que crucen una frontera exterior deberán realizar este registro completo y, en visitas posteriores, el proceso será más ágil y eficiente gracias a la reutilización automática de los datos biométricos.